UNA ACLARACIÓN

Quiero aclarar que mi nuevo libro no es realmente, tal como dice en la tapa en el sub título “una biografía de amor”, y que el título, si bien parece un poco tendencioso, es lo que los escritores llamamos un “giro publicitario”, o “giro comercial”, o “vil manipulación de la palabras para vender a todos los cholulos de la vida de otras personas y yo aprovecho, como son unos giles que compran cualquier cosa, el nombre de una celebridad para sacarles la guita”, y que no es tan así como dice en la tapa.

En fin, deseo explicar que mi libro “Yo le di unos besos a la princesa Máxima –una biografía de amor-” es una ficción, y que casi todo (o todo), no sucedió jamás (esto último está aclarado en la última página con letras muy chiquitas y góticas, pero se ve que no se ha entendido el mensaje).

Nunca tuve un romance mientras ella era una chica de novia con otro tipo en Nueva York y nunca le dije, años después “dejá a ese príncipe que se parece a Paul Mc Cartney y venite acá que vas a ver lo que es bueno”. Quiero aclarar, que nunca sucedió eso, porque no me gusta meterme en la vida de una persona que ni siquiera me conoce, y que tiene, sobre todo, a disposición al servicio de seguridad de la corte holandesa.

Aclarado este asunto, envío mis respetos a la familia real.

Muchas gracias.

Anuncio, de paso, que mi próximo libro “Mi días como amante de Yoko Ono, una verdadera historia de amor”, si bien tiene un título polémico, no es otra cosa que la historia de un hombre que busca un manuscrito de Oscar Wilde y se encuentra con un autógrafo de Yoko Ono…pero no quiero adelantar mucho.