ENTRE LA SANGRE AZUL Y EL CORAZÓN ROJO

UNA DECLARACIÓN DE PRINCIPIOS
Yo pensé en algún momento que iban a ser días personalmente horribles, aburridos, tristes. Todo lo contrario. Y cuando me encuentro contento y es un contentismo sostenido y perdurable, me gusta contradecir todo lo que escucho (y cuando me enojo o me aburro también). Por eso, en otro acto de provocación (no) gratuita quisiera hoy, antes de irme a bailar por ahí, despacharme contra todos mis contemporaneos y mayores en varios aspectos.
Estoy muy cansado de los que viven quejándose de esta época como si hubieran vivido en el siglo XVIII y marcan pautas inexistentes. No es nada raro escuchar a muchísimas personas decir "se perdieron los valores" o "ya no es como antes"
¿Y cómo era antes?
Ante esa pregunta, la respuesta será la esperada: "se perdió todo, ya no hay respeto, no hay valor por la familia, las chicas de ahora solo piensan en sexo, no se quieren casar, la juventud está perdida por la droga, ya no se lee, todos miran bailando por un sueño, son todos homosexuales, en la televisión sólo hay degeneración, etc, etc,etc".
La respuesta de este humilde crónista de la nada, acaso perdido entre los problemas de salud, de dinero y de más dinero (de amor me señalan acá...¿Qué es eso?) es muy sencilla: Por supuesto que esta época es horrible. Pero...¿Cuál no la fue?
Sería muy largo e inútil abarcar punto por punto los argumentos jurásicos acerca del mejor pasado y objetarlos, pero intentaré matar todos los pájaros de un solo tiro (a lo sumo de un bazookazo).
Nunca existieron tales valores. Las personas que dicen que el mundo está de capa caida a través de sus valores saben muy poco de historia. Y de eso, creo, puedo hablar. Primero, las civilizaciones que tienen al error como forma de desarrollo es porque nunca han mirado al pasado con produencia. Como bien decía Bob Dylan "el futuro está en el pasado" y es algo completamente cierto. Aquel que no aprende de los errores, está condenado a reiterarlos. Es por eso que podemos mirar al pasado con simpatía y aprenderlo, pero de nada sirve abrazarnos a él como si el mundo no se moviera.
Pongamos un ejemplo práctico: Una chica es dejada por el novio. El ex novio se va de viaje a Cuba, conoce a una morocha bárbara y se quedan juntos a vivr en la Habana comiendo los típicos alfajores que son patrimonio de esa ciudad y no de Mar del Plata cuyo patrimonio son los quesos homónimos. El punto es la chica abandonada. Supongamos que se queda en su casa llorando, comiendo helado, engordando, viendo novelas y fotos viejas de su amado. Esa mina está lista. No puede accionar porque se queda tildada en el recuerdo y en las suposiciones de todo asquello que no fue ni será jamás. Radicalemente la mujer debe (por lo menos fingir) olvidar todo, tirar todos los recuerdos a la basura y salir a chonguear un poco. Santo remedio. Y chau. Tiempo estimado de la experiencia (con duelo, llantos y todo): 12 días. En esas casi dos semanas la chica tiene permitido no ver a nadie, sufrir, etc. Si sigue estos pasos, el olvido de todo lo ingrato está garantizado. Es más, aventuro a decir que hasta podría reaparecer el muchacho (que es verdad, no tuvo mucho la culpa de dejarla porque ella era bastante molesta en su momento) y la ex novia abandonada podrá jactarse de algunos poderes y virtudes y hasta verse mejor fisicamente y dejar al tipo offside y mandarlo a cocer tapiocas (todo esto es válido también para hombres abandonados, salvo que el tiempo de duelo debe ser entre seis a ocho días, no más que eso).
¿Por qué digo esto? Porque si la mujer abandonada toma esa fuerza y hace lo que quiere, cuando logre afianzarse todo lo que venga a prometerle su ex novio le resbalará a la voz de: "¿Qué me importa a mí todo lo que venís a explicar?" y tendrá razón y dignidad.
El mismo principio, así búrdamente, se aplica a los paises. Si se pueden afrontar los golpes con dignidad, sanar las heridas con llanto y soledad, y se le da una buena patada al problema cuando se presenta de nuevo (en el caso de un país la patada debe ser con la justicia), todo renace de otra forma y se fortalece.
"Las chicas de ahora no se casan", dicen las señoras. Bueno, antes se casaban por estar embarazadas, o se arreglaban los matrimoños por conveniencia, o se casaban súper jóvenes porque era casi obligatorio, si no eras una prostituta o una solterona para toda la sociedad. Entonces: ¿Eso es un valor perdido o un derecho adquirido?
¡Mejor que no todas las minas se quieran casar! Si todas quiseran eso, uno no se podría enredar con ninguna.
Para esta gente todo era mejor antes, como si en la época de la revolución industrial la sociedad entera se haya manifestado a favor de esa época específica del siguiente modo: "Estando en este año, y este siglo y ante todos los adelantos que trae la maquina a vapor, es evidente que no podrá alcanzarse más perfección que ésta en todo lo que refiere a las ciencias, la tecnología, la familia, y el planeta en sí. Estamos, amigos, en el momento de la historia único y perfecto y será insuperable"
Nooo. No fue así. Había hambre, pestes tremendas, desinformación, guerras, marginalidad y necesidades que no podían ser satisfechas por muchísimos sectores. La época perfecta no exisitió nunca. También allí veían algunos adelantos con desagrado y se celebraban otros.
Personalmente prefiero, si debo ser operado, que sea con anestesia y no andar teniendo que morder un palo para mitigar el dolor; o no morirme por una gripe. Y encima puedo escuchar a Mozart y leer a Cervantes y no tener que esperar doscientos años para hacer ambas cosas.
Y si la juventud está perdida por la droga, será que lo sacaron de los reyes y cortes enteras fumadoras de opio. O más cerca en el tiempo: "los muchachos de antes no usaban gomina". Hace mas de 70 años que se canataba eso. Si los pibes usan drogas, es porque a alguien le viene bien que así sea.
Y no voy a andar con eso de "al sistema le conviene bla bla bla" O "El sistema no me deja progresar" No man. Eso lo puede decir un pibe que se muere de hambre, que el estado lo margina. Nosotros, si estamos leyendo esto, no podemos ni debemos pensar así. El sistema es cada uno. El sitema es todo y es nada. Si sos un consumidor compulsivo no es problema del sistema. En tal caso sos un gil que le hace el juego y el sistema se alimenta de eso y crece para hacerte seguir en la bola. No compren esa del sistema. Soy el conservador más izquierdista (como fue y es la verdadera izquierda, y no la chabonada) y me di cuenta que fusilando a Macri, que es una momia a cuerda y que no sabe nada de nada, no acabamos con el problema. El problema se soluciona eligiendo a la gente idonea que sepa gobernar, que sea honesta y que lleve ante una justica independiente de berretines ysin ningún compromiso (porque comprometerse y ser independiente es un oxímaron) a esta clase de gente y de esa forma se termina con el tan peligroso sistema. El sistema, amigotes, es tan inofensivo y destructible como cualquier cosa. Basta con separarlo, filtrarlo y eliminarlo de la manera correcta y capaz un día hagamos que la gente que vive comiendo basura pueda sentarse en la misma mesa con nosotros y no nos de miedo, si no todo lo contrario, Y un día así, terminaremos con muchos problemas, porque todos queremos acabar con el hambre de África y las muertes por sida, pero vamos de a poco y por todo a la vez. Primero hagamos lo que tenemos que hacer. (Me imagino que alguno en este momento debe estar diciendo "este está loco, que se va a termina todo eso" y puede ser, pero el sistema tiene un alimento báscio: el dinero. Si no les damos guita, chau sistema).
Y para terminar y casi como una superficialidad, cortémosla con eso decreernos más vivos por no ver "Bailando por un sueño". Porque escucho que nadie lo ve y todos sabemos algo del programa. Yo mismo lo he visto un par de veces y no me siento menos inteligente porque entiendo que es un show que no me interesa comprar (siendo un tipo al que la T.V lo aburre tremendamente. Es más ni siquiera tengo cable porque no me gusta la tele, pero no por ser un intelectual, si no por apatía, aunque algunos proramas de tanto en tanto veo. Terminemos con el mito de que aquel que no ve televisión es inteligente. Muchas veces vi canal A o el History Channel y son muy buenas propuestas, asi que la televisión no es sólo un toco de pavadas). Si podemos diferenciar la vida real de un juego, y a la vez -citando a Nieztche- tomar la vida con esa misma seriedad con la que un niño toma un juego, entonces llegará el día en que "bailando por un sueño" sea un recuerdo y nos interesen otras cosas más productivas. Porque la televisión debe dar algo más que un show y toda la basura que da, pero ante la falta de opciones, si estoy aburrido y con tiempo, pues veo lo que puedo ver y listo. Eso no quita que pueda pasarme cien noches leyendo a Borges.
Claro que hay cosas que son una idiotez, pero para ampliar las opciones debemos dar de comer, comer nosotros, educarnos y educar, sacar del medio a los tontitos del teléfono celular y el autito y sus ampulosas carreras basadas en la humillación del que no tiene y entonces no todo tiempo pasado habrá sido mejor, ni tantas supercherías ni andaremos pregonando con escándalo la falta de valores y podremos, con una buena vista al pasado, hacer un mundo -tal vez por primera vez- con valores de verdad. Para que haya valores reales, debemos incluir a todos los excluidos.
Lo digo como músico y escritor, como habitante de una de las ciudades más lindas del mundo, y también (como para terminar de crispar a más de un idiota) como izquierdista, como rojo. Y para peor de los grandes genios de la moral puedo hablar más que todos los niños bien y conchetitos de este país pues, aunque no tengo un mango, soy aristócrata y bisñeto de una marquesa fracesa. Pero hincha de boca y argentino... sobre todo argentino.