LUNES, MIENTRAS DESAYUNABAMOS EN LA CAMA.
Por una cuestión personal (fui amenazado) evito el nombre de la protagonista de la historia.
Ella: ...Y la verdad que me gustó eso que escribiste del Facha Martel.
Marcelo: Eso...no lo entiendo. Todo el mundo está siempre diciendome que eso está muy bueno, pero para mí es lo más flojo que escribí.
Ella: Es muy bueno, lo que pasa es que siempre estás criticandote a vos mismo. Sos un incorformista.
Marcelo: No. Soy exigente. Con las canciones hago lo mismo... Estas medialunas están muy buenas.
Ella: ¿Ves? Sabía que te iban a gustar. Y vos que no querías...
Marcelo: No es que no quiero, es que...bah, no importa.
Ella: ¿Qué? Decime.
Marcelo: No, no importa.
Ella: ¡Dalee!
Marcelo: Es que no me gusta desayunar.
Ella: Ya lo sé. Te conozco hace mucho, me lo decís siempre. ¿Ves? Conmigo desayunás. Te hace bien.
Marcelo: ¿Por qué todas me quieren cambiar? No es sólo a mí. Las mujeres tienen esa tendencia.
Ella: ¿Eh? ¿Qué todas?
Marcelo: Digo en general. Las mujeres intentan siempre cambiar al tipo que les gusta, o con el que salen, o duermen o lo que sea.
Ella: Eso es mentira. Pasa con algunas, pero no todas...¿Yo acaso te hago cambiar?
Marcelo: Algunas cosas sí.
Ella: (riendose) ¡Que caradura! Aparte vos dijiste todas me hacen lo mismo.
Marcelo: (escapando habilmente del problema) En sentido figurado.
Ella: Claro
Marcelo: Me refería a mis amigas.
Ella: Sí. Demasiadas amigas tenés para mi gusto.
Marcelo: Que mina celosa.
Ella: Un poco.
(risas)
Marcelo: Con Manuel siempre hablamos eso de los cambios que las mujeres ejercen en nosotros.
Ella: Es que vos y Manuel son dos atorrantes ( N de la R: sí, dijo eso la muy irrespetuosa)
Marcelo: (escupiendo el té mientras rie) ¿Queeeé? ¿No ves que sos una atrevida?
Ella: Yo sólo te digo lo siguiente, a tus amiguitas les voy a dar el olivo muy pronto.
Marcelo: (riendo cada vez más fuerte) No te vas a atrever.
Ella: ¿Querés ver? Probame
Marcelo: Encantado. A esto le falta azucar.
Ella: Uy nene. Está muy lejos ( N de la R: mi cama es muy alta y todo se hace imposible de alcanzar)
Marcelo: Voy a hablar de este tema en No Somos Nada.
Ella: Y voy a seguir teniendo razón.
Marcelo: Eso lo veremos. Es más, voy a transcribir esta misma conversación.
Ella: ¡¡¡Ni se te ocurra!!!
Marcelo: (a carcajadas) Ya vas a ver.
Ella: (riendose) Ni se te ocurra en serio ¿eh?
Marcelo: Lo voy a hacer.
Ella: (resignada) Bueno, pero no pongás mi nombre o... ( N de la R: Se corta el texto aca porque no puedo poner semejante cosa, pero hizo alusión a algo del día del padre).